A través de la lente de su cámara, Mattia Passarini lleva a su audiencia en un viaje por algunas de las regiones más aisladas del mundo – un viaje inspirado por la diversidad. Ganador del premio en el 2016 como, Fotógrafo de Viajes del Año de National Geographic, el fotógrafo de origen italiano captura las distintas culturas y tradiciones retratando a su gente. Sus viajes por algunas de las regiones más remotas de nuestro planeta, nos presentan un cautivante contraste de matices, dentro de un mundo cada vez más uniforme y monótono.

Como parte de nuestra serie de conversaciones con aventureros inspiradores, le pedimos a Mattia que nos contara un poco más acerca del origen de su motivación y de cómo supera los retos que enfrenta en sus viajes. Pero primero, nos va a hablar acerca de la historia que existe detrás de una de sus fotografías favoritas.

Hombres, mujeres y niños de la Tribu Yali en Papúa del Oeste, Indonesia © Mattia Passarini

Yalimo es mi favorita. La tribu Yali vive en una región remota y aislada en la provincia de Papúa del Oeste en Indonesia, solo se puede llegar ahí cruzando a pie las Montañas Jayawijaya, que están al este del Valle del Baliem, también conocido como Yalimo. Son una comunidad muy tradicional, y tuve que caminar más de diez días para finalmente encontrarlos. He visitado muchos grupos tribales en el pasado, pero la tribu Yali es bastante única. Solamente unos pocos, y locos viajeros como yo, los visitan cada año, así que me siento muy afortunado.

Los hombres Yali utilizan aros de ratán (mimbre) alrededor de sus cinturas y caderas, y a pesar de que los aros no están entrelazados entre sí, se asemejan bastante a una falda. En la parte de enfrente, los aros se sostienen con el “humi” – que es un cubre pene. Las mujeres utilizan una pequeña falda de pasto que cubre la parte frontal e inferior de sus cuerpos, y el indispensable “bilum” – una bolsa tipo red hecha de fibras de orquídea, que cuelga de sus cabezas y cae por la espalda para cubrir sus posaderas.

Los diez días de excursión para llegar hasta ahí fueron todo un reto, porque acababa de pasar dos semanas en la selva visitando la tribu Korowai. Estaba físicamente exhausto y mis pies estaban infectados, pero sabía que esta era una oportunidad única, así que me sobrepuse y seguí adelante. Cuando llegué y lo vi… simplemente fue increíble. Las personas, el ambiente… todo fue mágico. Es algo que nunca olvidaré.’

¿Qué inspira tu trabajo y cuándo sentiste por primera vez el gusanillo de viajar?

La contribución de Mattia que lo llevó a ganar el premio al Fotógrafo del Año de National Geographic © Mattia Passarini

El haberme mudado al Reino Unido cuando tenía 18 años despertó en mí el interés de viajar, y mi trabajo se inspira mucho en el hecho mismo de viajar; los descubrimientos que haces en los viajes, y las diferentes culturas con las que entras en contacto. Lo que más me apasiona y me impulsa, es poder ver la gran diversidad de culturas.

Hay tradiciones y culturas que han existido durante miles de años, y que son tan diferentes de lo que la mayoría de nosotros alguna vez podríamos experimentar. En tan solo una o dos generaciones, la mayoría de ellas habrán desaparecido. Esta diversidad es lo que me impulsa a viajar hasta algunas de las regiones más remotas de nuestro planeta.

¿Cómo eliges tu siguiente destino?

Retrato de una mujer del pueblo Li en China junto a una joven niña tibetana © Mattia Passarini

Es muy complicado y simple a la vez. Existen tantas culturas y tradiciones en el mundo que quisiera explorar. Pero, la triste realidad es que la mayoría de ellas están desapareciendo rápidamente; por lo que en realidad se ha convertido en una carrera contra el tiempo. Por eso, trato de priorizar lo mejor que puedo.

Por esta misma razón, mi trabajo se enfoca mucho en las personas. Trato de retratar las diferentes culturas a través de las características físicamente distintivas de su gente. Me encanta retratar a las personas porque cada una cuenta una historia diferente. Yo simplemente trato de leerla.

¿Cómo te conectas con las personas de la localidad cuando viajas?

He aprendido que si le abres tu corazón a las personas, ellas harán lo mismo contigo.

¿Qué retos has encontrado en tus viajes, y cómo los has superado?

Los Bambuti, uno de varios grupos pigmeos en la República Democrática del Congo © Mattia Passarini

Siempre que viajas a regiones remotas del mundo habrá retos en cada esquina. Eso es algo a lo que ya me he acostumbrado. En el 2014, me arrestaron sin motivo alguno, justo a las afueras del bosque “Ituri” en la República Democrática del Congo. Era un área aislada, no hablaba el idioma y no tenía ni idea de qué pasaría después. Pensándolo bien, esa es probablemente una de las situaciones más peligrosas y desafiantes que he tenido que superar.

¿Tienes algún consejo para alguien que quiera iniciarse en la fotografía de viajes, o para alguien que quiera viajar a lugares remotos?

La tribu Korowai en Papúa del Oeste, Indonesia © Mattia Passarini

Sé paciente y no pienses demasiado. Nunca sabes lo que te espera a la vuelta de la esquina, así que no vale la pena tratar de adivinar qué pasará. Simplemente ten la mente abierta ante cada experiencia que se te presente y prepárate para pasar horas en caminos de terracería o haciendo trekking en la montaña. En pocas palabras, compra un boleto de avión, lánzate a la aventura… y encontrarás el camino. !La vida es demasiado corta para pensar las cosas dos veces!

Para más información sobre Mattia, sus viajes y su trabajo, visita su sitio web y síguelo en Instagram. Esta entrevista fue realizada como parte de la constante iniciativa de “momondo Purpose” para promover la diversidad, los viajes y un mundo más abierto. Para más información, visita nuestra página web Let’s Open Our World.